sábado, 31 de marzo de 2012

El largo camino a Londres 2012

Por Martín Estévez

Para los deportes de equipo, lograr la clasificación a los Juegos Olímpicos de 2012 es incluso más difícil que disputar un Mundial. ¿De qué manera se definen los países participantes?

Todos los deportes, con la única excepción del fútbol, consideran que los Juegos Olímpicos están al nivel de los Mundiales. La medalla de oro vale tanto o más que un campeonato del mundo, por eso los torneos clasificatorios se viven con intensidad. En los deportes colectivos, protagonizar los Juegos Olímpicos es incluso más difícil que llegar a un Mundial, porque los participantes son menos. ¿Cómo se consigue la clasificación para Londres 2012? Analicémoslo caso por caso.

Fútbol
La FIFA no permite que nada le quite brillo a la Copa del Mundo, por eso a los Juegos Olímpicos concurren equipos juveniles (menores de 23 años) que pueden sumar a tres mayores. De los 16 conjuntos, están definidos seis: Inglaterra (país organizador), España, Suiza y Belarús (clasificaron en el campeonato europeo sub 21), Brasil y Uruguay (Sudamericano Sub 20). Los países restantes serán tres de África (se define durante septiembre en Mozambique), tres de Asia (marzo de 2012), dos de CONCACAF (también en 2012, en Estados Unidos) y uno de Oceanía (en diciembre). A nivel femenino concurrirán 12 equipos.

Básquet
Participarán 12 selecciones en hombres y en mujeres. Del lado masculino, sólo está definida la presencia de Estados Unidos, campeón mundial. Luego se clasificarán dos de Europa (el Eurobasket se disputa en Lituania entre el 31/8 y el 18/9), dos de América (Torneo de las Américas, en Argentina, entre el 20/8 y el 11/9), uno de África (17 al 28/8 en Madagascar), uno de Oceanía (7 al 11/9 en Australia) y uno de Asia (15 al 25/9 en China). Los cuatro restantes surgirán del Preolímpico que se jugará del 2 al 8 de julio de 2012. Entre las mujeres, Estados Unidos también es el único clasificado y las eliminatorias finalizarán el 1° de julio de 2012.

Voley
La carrera rumbo a Londres 2012 aún no ha comenzado. Sin embargo, Gran Bretaña tiene su lugar asegurado por ser sede. Entre los hombres, los restantes once equipos provendrán de distintos torneos: tres de la Copa del Mundo (será en noviembre), uno de cada campeonato continental (Europa, América, Asia, África y Oceanía) y tres de los torneos preolímpicos que se disputarán durante junio de 2012 en Italia, Alemania y Japón. El mismo criterio se utilizará en el voley femenino.

Hockey sobre césped
Aunque participarán 12 selecciones tanto masculinas como femeninas, hay diferencias en el sistema clasificatorio. Entre los hombres jugarán Gran Bretaña (sede), Pakistán (campeón de Asia), tres equipos de Europa, dos de Oceanía, uno de América y uno de África. Completarán la lista los ganadores de los tres preolímpicos que se efectuarán en India (febrero de 2012), Bélgica (marzo) y Japón (abril y mayo). Las mujeres tienen calendarios casi iguales, pero la gran diferencia es que por Asia ya hay dos clasificados (China y Corea) y que Europa sólo tendrá dos plazas además de la que ocupa el local.

Handball
Jugarán el país sede (Gran Bretaña), el campeón del mundo (Francia), el campeón europeo (se definirá en Serbia en enero de 2012), el de Asia (comienza el 23/10 en Corea del Sur), el de África (enero de 2012, en Marruecos) y el campeón panamericano (octubre, en México). Luego, en abril del próximo año, habrá tres torneos clasificatorios que otorgarán dos lugares cada uno. Se realizarán en Dinamarca, España y Suecia. En el handball femenino están clasificados Gran Bretaña y Noruega. La etapa eliminatoria culminará en mayo de 2012.

PUBLICADO EN ACCESS DIRECTV Nº34 (AGOSTO DE 2011)

sábado, 17 de marzo de 2012

Vélez campeón - Después del dolor

Por Martín Estévez

Venía de perder el Apertura y tuvo un comienzo irregular. En el medio, se quedó afuera de la Libertadores. Pero al final, el Vélez de Gareca se sobrepuso a todo y festejó su merecido título.

Había terminado la fecha número 3 y ahí estaban los candidatos: el Estudiantes de la Brujita Verón, último campeón; el River de Jota Jota, que arrancó con dos triunfos y un empate; Racing, con el sorprendente Teófilo Gutiérrez; el Boca de Falcioni, que había sumado a Erviti; el San Lorenzo de Ramón, siempre una amenaza; y hasta Olimpo, que había picado en punta. Todos ellos, juntitos ahí arriba, llevándose los flashes y los vaticinios de gloria. Al fondo, compartiendo el anteúltimo puesto, sólo superando a Quilmes, estaba Vélez.

El subcampeonato en el Apertura 2010, luego de pelear hasta el final con Estudiantes, parecía el justificativo perfecto para el mal comienzo. El Fortín se había quedado con las manos vacías luego de una muy buena campaña y el golpe anímico había derrumbado al plantel. Sonaba en todas partes: el periodismo, los hinchas rivales y hasta los propios velezanos alimentaban el vértigo irreparable del fútbol argentino. No es que en tres fechas cambia todo: en tres fechas cambia todo una, dos, tres veces. Vélez, en tres fechas, había perdido el rumbo.

Los 36 primeros minutos del torneo, en realidad, ya les habían permitido a los más apurados una primera confirmación: este equipo no era el mismo que había terminado el torneo pasado ganándoles 2-1 a Tigre, 4-0 a Godoy Cruz, 2-0 a Huracán y 2-0 a Racing. ¿Qué había pasado en esos 36 minutos? Parra y Battión habían gritado en la cara de Barovero; Independiente le estaba ganando 2-0 a Vélez. Enseguida, y otra vez, cambió todo. Maxi Moralez se puso el equipo al hombro y descontó; y el Burrito Martínez entró un ratito, después de su paso por la Selección argentina, para dejar el resultado 2-2.

En la fecha 2, otra vez, Vélez ya no era el mismo. Grazzini armó un desparramo con dos golazos y All Boys le ganó 2-1. Sin Silva, pero con David Ramírez, Moralez y Martínez, sufría una derrota desacostumbrada, atípica en los últimos torneos. La recuperación llegaba en cancha de Argentinos: ventaja por gol del Mago Ramírez, un hombre más durante casi todo el segundo tiempo y manejo de pelota. Pero entró Niell, puso el 1-1 final y ahí estaba Vélez: al fondo, compartiendo el anteúltimo puesto, solo superando a Quilmes. Y qué partiditos se venían: Boca, River, San Lorenzo...


Grande contra los grandes
Fernando Ortiz no será recordado por los hinchas dentro de veinte años, pero su gol contra Boca fue vital. Tiro de esquina ejecutado por Ramírez, centro pasado, y cabezazo del central que, al lado de Seba Domínguez, aumentó la seguridad defensiva de Vélez a medida que avanzó el Clausura. Ése 1-0 (sí: el último partido de Palermo contra el Fortín fue sin goles) alivió la situación en el Clausura y permitió seguir mirando con ganas a los dos torneos (la Libertadores estaba en sus etapas iniciales). “La gente estaba golpeada”, reconoció Gareca tras el partido.

La quinta fecha fue un placer. River, invicto y en su casa, sufrió a Santiago Silva. El uruguayo, primero, aprovechó el error más grosero del campeonato (el arquero Chichizola quiso rechazar la pelota y le rebotó en la otra pierna) y tocó con el arco vacío. Después empató Pavone, pero este Vélez es mucho Vélez para este River: Ricky Álvarez elaboró una gran jugada personal, Chichizola intentó subsanar ese primer error y le manoteó la pelota, pero ahí estaba Silva para meter el botín a seis minutos del final: triunfazo 2-1 en el Monumental y la tabla, tan cruel dos fechas antes, ya mostraba a Vélez a dos unidades de los tres punteros: San Lorenzo, Olimpo y Banfield.

La triste suspensión del partido ante San Lorenzo no detuvo a un equipo en ascenso, parecido al del semestre anterior, firme, serio. En la fecha 7, hubo show: Silva la metió de penal y festejó subiéndose al carrito de los lesionados; Ricky Álvarez se llevó por delante la pelota en el segundo; y Juan Manuel Martínez la clavó pegadita al travesaño. Un 3-0 demoledor que obligó al resto a mirar con cuidado la escalada del Fortín. Habían quedado atrás los endebles comienzos. No solo en el Clausura, sino también en la Copa, donde las derrotas ante Universidad Católica (3-4 en Liniers, después de estar 3-1 arriba) y Unión Española habían generado preocupación.

Un verdadero equipo
Olimpo, en uno de los mejores torneos de su historia, tampoco pudo. Cuando el Vélez de Gareca toma envión, el paisaje se torna feo para los rivales. Ricardo Álvarez arrancó despierto en Bahía Blanca, recuperó una pelota con esfuerzo físico y al minuto de juego puso el 1-0. A Papa le cobraron un penal dudoso (Rolle marcó el 1-1) pero su revancha llegó en el segundo tiempo: también la robó cuando Olimpo salía, siguió la jugada hasta el final y aprovechó un rebote de Tombolini para empujar el 2-1. Fecha 8, y Vélez a uno de la punta.

Luego de un difícil empate en Chile (0-0 ante Universidad Católica), en el torneo local todo resultaba más sencillo: contra Newell’s, a los 8 minutos, Silva ya había gritado su cuarto gol en el torneo con un derechazo bajo desde fuera del área. El triunfo jamás corrió peligro, y mucho menos después de un desborde del Burrito Martínez que Augusto Fernández convirtió en el 2-0.

Las horas de viaje comenzaban a acumularse; la temporada atravesaba su momento más intenso. Había que jugar tres partidos seguidos fuera de casa: el 14, 17 y 20 de abril. La clasificación para los octavos de final se definía en Chile, y el 3-0 a Unión Española (un gol de Moralez y dos de Silva) convirtió a Vélez en gran candidato a llevarse la Libertadores. Tres días después, en Santa Fe, hubo que demostrar personalidad. Colón ganaba 1-0 y el partido se extinguía, pero en el minuto 48 del segundo tiempo, el enésimo centro al área de Pozo terminó con Zapata empatando el partido. El abrazo efusivo entre Gareca y el Turu Flores en el banco de suplentes lo evidenciaba: Vélez había dado un paso adelante con el 1-1 final.

El cierre de la minigira fue en La Bombonera, para completar el partido suspendido ante San Lorenzo. A diez minutos del final, Silva volvió a abrir el marcador con un derechazo cruzado y después Álvarez asistió para otro toque goleador de Augusto Fernández: 2-0 al Ciclón de Ramón en una Bombonera vacía de hinchas pero llena de intensidad. Se había cumplido más de la mitad del torneo y, por primera vez, Vélez asumía el liderazgo. Solo, con dos puntos de ventaja, imperturbable.

Carusazo y después
Resulta complicado explicar el partido ante Quilmes, incluso a la distancia. Aunque, desde la llegada de Ricardo Caruso Lombardi, el Cervecero levantó un poco su nivel y mucho su estado anímico, no debería haber estado a la altura de Vélez. Pero lo estuvo. Y eso que Canteros había abierto el marcador con un cabezazo parecido al de Messi contra Manchester en la final de la Champions League 2009. ¿Qué pasó, entonces? Pasó un zurdazo furioso de Caneo en medio de una montonera en el área y dos contraataques bien resueltos por el hasta entonces desconocido Pablo Vázquez; todo en 17 minutos; todo para que Quilmes diera la sorpresa del torneo; todo para que cualquier equipo se llene de dudas. Pero el Vélez de Gareca no es cualquier equipo.

El partido de ida de los octavos de final de la copa terminó con un triunfo 3-0 ante Liga de Quito. Cuatro días después, por la fecha 12 del Clausura, fue victoria 4-0 ante Estudiantes. Fue en La Plata. Fue contra el último campeón. Fue el punto más alto de Vélez en los últimos años. Gran pase de Moralez, pecho y gol de Augusto: 1-0. Tremendo golazo de Maxi desde perspectiva imposible, al ángulo izquierdo de Orión: 2-0. Lindo enganche del Burrito que termina en penal convertido por Moralito: 3-0. Toque sutil de Ramírez en el área: 4-0. Vélez era el mejor equipo del país; Quilmes había quedado atrás.

El avance a cuartos de final en la copa fue un trámite: 2-0 a Liga de Quito en Ecuador. Banfield, por la fecha 13 del Clausura, costó bastante más pero, a ocho minutos del final, a Cubero le bajaron un centro y Poroto la tocó suave de derecha para quebrar el 0-0. Y, buena costumbre del Vélez de Gareca, en los últimos minutos amplió el resultado. El que gritó el 2-0 fue Ramírez.

Cuatro puntos de ventaja a seis fechas del final. Así de rápido Vélez se despegó del resto. Mientras tanto, claro, dejaba todo en la copa. Aunque duela, ese era el principal objetivo del semestre. El 12 de mayo abrió la serie de cuartos de final con otra goleada: 3-0 a Libertad de Paraguay. Contra Lanús, que estaba a siete de distancia, Gareca no puso a varios titulares y a Vélez le costó la tercera derrota en el torneo: 2-3 pese a los goles del Mago Ramírez y con el primer error serio de Barovero en el torneo. Godoy Cruz se ponía a un punto, pero ¿cómo quejarse si, en la Libertadores, Vélez ganaba 4-2 en el estadio Defensores del Chaco y avanzaba a semifinales?

La recta final
Muchos hinchas de Vélez querrían ignorar la mitad de la historia, porque llegaban al tramo final de la temporada con un objetivo futbolísticamente majestuoso: ganar el Clausura y la Copa Libertadores con diferencia de días, demostrar que el Fortín era el mejor de la Argentina y de América. Querían la gloria absoluta.

El triunfo ante Gimnasia (2-0, fecha 15) fue un avance importante. Silva, otra vez Silva, siempre Silva, abrió el resultado picándola por encima de Monetti. Golazo. Moralez, otra vez Moralez, siempre Moralez, lo cerró con un penal. La línea defensiva (Cubero, Domínguez, Ortiz, Papa) no solo se repetía partido a partido, sino que se solidificaba.

El 0-1 contra Peñarol en Uruguay no parecía mal resultado en el comienzo de las semifinales coperas, y ni siquiera la derrota 1-2 ante Tigre, a tres fechas del final del Clausura, preocupó realmente a los jugadores, al cuerpo técnico, al plantel. Pero llegó la puñalada: eliminación de la Libertadores pese a ganar 2-1 en la revancha, por el maldito gol de visitante, penal errado por Silva incluido. Todavía duele.

¿Dudas? Nada de nada. Los pasos finales rumbo a la consagración en el Clausura fueron dados con determinación, sin traumas. Primero, en el mano a mano ante otro candidato al título, Vélez superó claramente a Godoy Cruz: 2-0, con un golazo de Martínez tras dejar a dos rivales en el piso y otro (sobre la hora, qué raro) de Ramírez. Y finalmente, ante un candidato al descenso, tampoco hubo pánico: otro gol de Silva, otro 2-0, otro título. El camino exitoso que se inició en 1993 parece no tener fin. Dieciocho años después, Vélez no para de dar vueltas y vueltas y vueltas. Los más chicos ya se acostumbraron a ganar. Los más grandes, que vivieron las épocas más difíciles, se siguen sorprendiendo: “¿Ocho títulos locales? ¿Ya tenemos ocho títulos locales?”. Sí, Vélez: ocho.


PUBLICADO EN EL GRÁFICO: VÉLEZ CAMPEÓN (JUNIO DE 2011)

martes, 13 de marzo de 2012

Los hits (junio de 2011)

Los futbolistas que se destacaron en el mes - por Martín Estévez

Messi, Rooney, Radamel, Hulk... Los que venían liderando no jugaron ni un partido hasta nuestra fecha de cierre, lo que permitió el retorno de Iniesta al liderazgo tras diez meses. Por primera vez, un jugador de Belice pisa el ranking.

1) Andrés Iniesta (España)
Campeón de Europa, sumó goleadas contra EE.UU. (4-0) y Venezuela (3-0).

2) Javier Hernández (México)
Gran inicio en la Copa de Oro: tres goles a El Salvador y dos a Cuba.

3) Mario Gomez (Alemania)
En la clasificación para la Euro, dos gritos ante Austria y uno a Azerbaiján.

4) David Villa (España)
Otro campeón europeo en racha: gol a Venezuela para la Furia española.

5) Neymar (Santos / Brasil)
Liquidó a Cerro Porteño en la copa y enfrentó a Holanda con su selección.

6) Cristiano Ronaldo (Portugal)
Perdió cinco puestos porque no se lució en el 1-0 de Portugal ante Noruega.

7) Maximiliano Moralez (Vélez Sarsfield)
El Enano fue el más regular del campeón: la rompió en todos los partidos.

8) Pedro (España)
Tras el gol en la final de la Champions, gritó para España ante Venezuela.

9) Ikechukwu Uche (Nigeria)
Por si no lo conocíamos, hizo dos goles y la rompió en el 4-1 ante Argentina.

10) Giovani dos Santos (México)
Cuatro goles para su selección: dos a Nueva Zelanda y dos a Cuba. ¿Lo tenían?

Del 11 al 20: 11) Zlatan Ibrahimovic (Suecia), 12) Roman Pavlyuchenko (Rusia), 13) Tranquillo Barnetta (Suiza), 14) Santiago Silva (Vélez), 15) Julio César (Brasil), 16) Luis Suárez (Uruguay), 17) Alejandro González (Peñarol), 18) Eden Hazard (Bélgica), 19) Deon McCauley (Belice), 20) Dirk Kuyt (Holanda).

PUBLICADO EN EL GRÁFICO Nº4412 (JULIO DE 2011)

domingo, 11 de marzo de 2012

El medallero (junio de 2011)

Por Martín Estévez

Oro: Leonardo Gutiérrez
A los 33 años, Leo se consagró bicampeón de la Liga Nacional de Básquet con Peñarol de Mar del Plata, al derrotar a Atenas en la serie final. Es su octavo título, con cinco equipos distintos, que se suman a sus dos medallas olímpicas con la Selección. Héroe total.

Plata: Eduardo Schwank
El rosarino, 192º del ranking ATP, se unió al colombiano Juan Sebastián Cabal (187º) y se anotaron para jugar el dobles de Roland Garros. Algo hicieron: derrotaron a una de las mejores parejas de la historia (los hermanos Bryan) y llegaron hasta la final.

Bronce: Maximiliano Díaz
¿Salto triple en El Gráfico? Claro que sí: el salteño la descosió en el Sudamericano de atletismo realizado en Buenos Aires. Clavó una marca de 15,61 metros, récord argentino, que le permitió llevarse la medalla de oro. Hacía 80 años que un argentino no lo lograba.

Plomo: Unión (Santa Fe)
Atlético Rafaela lo había derrotado en Santa Fe, consiguiendo así el ascenso a Primera División. ¿Qué pasó? Pasó que misteriosamente se apagaron las luces del estadio, impidiendo los festejos y poniendo en peligro a los visitantes. Los dirigentes no asumieron culpas.

Lata: Roberto Fernández
¡Ay, Roberto! Russo confió en él y le entregó el arco de Racing en la fecha 8. Desde entonces, la Academia sumó 3 triunfos, 2 empates y 6 derrotas, y lo que el paraguayo sumó fueron malas actuaciones. Contra Godoy Cruz (2-3) dejó una pésima imagen y regaló el partido.

Cartón: Rosario Central
Nos duele, pero no nos queda otra que pegarle al árbol caído: su temporada en el Nacional B resultó tristísima. El equipo perdió más de lo que ganó, terminó más cerca del último que del primero y los ídolos (Figueroa, el Kily González) no salieron indemnes. A resucitar, Canalla. A resucitar.

PUBLICADO EN EL GRÁFICO Nº4412 (JULIO DE 2011)

sábado, 10 de marzo de 2012

Giovani Dos Santos - El héroe de la gran conquista mundial

Por Martín Estévez

Giovani dos Santos tiene 22 años, pero parece que jugara hace 23. Desde su aparición, en México lo han amado, criticado, comparado con Pelé y hasta minimizado. Llegará a la Copa América en un momento más tranquilo, aunque es evidente que tendrá la responsabilidad de sacar adelante a un equipo que llega en desigualdad de condiciones.

Nació en 1989 y en un Mundialito Sub 12 (sí, Sub 12) los asistentes técnicos del Barcelona lo vieron y recomendaron su fichaje, por lo que Giovani jamás jugó en el fútbol mexicano. Debutó con el Barça a los 17 años, marcando un gol en un amistoso contra un equipo danés cuando ya era héroe en su país. ¿Por qué? Porque en 2005 había sido la gran figura del Sub 17 que consiguió en Perú el único campeonato mundial en la historia de México. En el equipo catalán tuvo algunas buenas actuaciones (le hizo tres goles a Murcia en un partido), pero al final de la temporada 2007/08 fue transferido al Tottenham inglés. Allí comenzó una serie de decepciones que le quitó brillo a su carrera, pero también aflojó la presión sobre su espalda.

No se afirmó en Tottenham (15 partidos), Ipswich Town (8 partidos) ni Galatasaray de Turquía (18 encuentros). En 2011 volvió a España para jugar en Racing de Santander, donde tuvo un muy buen semestre (5 goles en 14 partidos). Volante creativo, enganche, mediapunta, wing retrasado… La posición de Gio es difícil de definir. Posee una habilidad llamativa y facilidad para gambetear. Con la selección mayor ganó la Copa de Oro 2009 y jugó 4 partidos en el Mundial 2010.

PUBLICADO EN EL GRÁFICO Nº4412 (JULIO DE 2011)

martes, 6 de marzo de 2012

Paolo Guerrero - Un peruano que grita en Alemania

Por Martín Estévez

Rarísimo caso el de Paolo Guerrero: es uno de los futbolistas más importantes de la historia del fútbol peruano pero jamás jugó en Perú. Ese tipo de situaciones, un poco más habituales en Brasil o en la Argentina (el caso Messi, por ejemplo), son totalmente atípicas en el resto de Sudamérica.

Guerrero nació el 1° de enero de 1984 en Lima y se inició en las divisiones juveniles de Alianza Lima, uno de los tres equipos más importantes de su país. Sin debutar en Primera, fue convocado para la Selección Sub 17, con la que disputó el Sudamericano 2001; enseguida, Wolfgang Dremmler, entrenador de los juveniles del Bayern Munich, le chifló al club para que se lo lleve. Con la impunidad que les da el dinero, los alemanes aprovecharon que no tenía contrato con Alianza y solo pagaron derechos de formación.

Mientras ganaba experiencia jugando en el equipo B del Bayern (21 goles en 24 partidos en la temporada 2003/04), debutó en su selección a los 20 años. A partir de ese momento se convirtió en imprescindible, marcando 2 goles en las Eliminatorias para Alemania 2006, 1 en la Copa América 2007 y otros 6 en partidos amistosos. Luego de 44 partidos jugados y 13 goles en Bayern Munich, pasó al Hamburgo, club al que aún sigue perteneciendo y con el que suma 45 tantos. Delantero habilidoso y difícil de descifrar, se hará cargo de la ofensiva de Perú ante la ausencia por lesión del histórico Claudio Pizarro.

PUBLICADO EN EL GRÁFICO Nº4412 (JULIO DE 2011)

sábado, 3 de marzo de 2012

Estrellas en el agua

Ryan Lochte representará a Estados Unidos.
Por Martín Estévez

El Mundial de Shanghai reunirá a las grandes figuras de la natación, con el fantástico Michael Phelps como atracción principal. ¿Mantendrá Estados Unidos su liderazgo?

El crecimiento de los campeonatos mundiales de natación es notable. No sólo desde su primera edición, la de 1973, sino que se evidenció en las últimas dos décadas. Desde el Mundial de 1991 hasta el que se realizará del 16 al 31 de julio en Shanghai, China, se ha duplicado el número de participantes y se ha potenciado el interés que genera en el planeta.

Son cinco las disciplinas incluidas en el Mundial. En nado sincronizado, Rusia ha dominado las últimas ediciones. En saltos, China es históricamente imbatible. El waterpolo se divide por géneros. Mientras las mujeres estadounidenses son las rivales a vencer, entre los hombres hay un cuarteto de candidatos: Serbia, Croacia, España y Hungría. Y en aguas abiertas suelen destacarse los nadadores rusos.

La natación tradicional, por su parte, conjuga a la mayoría de las estrellas. Estados Unidos, líder del medallero histórico, llegará con tres consagrados comandando su escuadrón. Natalie Coughlin, ganadora de once medallas olímpicas, intentará imponerse en los 100 metros espalda, 100m libre y en una competencia de relevos. Ryan Lochte, que suma catorce medallas entre Juegos Olímpicos y Mundiales, competirá en 200m libre, 200m espalda y 200m y 400m medley. Y el gran Michael Phelps, quizá el mejor nadador de todos los tiempos, continuará su leyenda participando en cuatro pruebas individuales (200m libre, 100m y 200m mariposa, 200m medley) y tres de relevos.

Alemania, siempre poderosa, confía en lo que puedan realizar Paul Biedermann (record mundial en 200m y 400m libre) y Britta Steffen (recordwoman en 50m y 100m libre). Francia, por su parte, promete una buena cosecha de medallas con Frederick Bousquet, Alain Bernard (ambos en 50m libre y una carrera de relevos) y Camille Lacourt (100m espalda). Y atención con una dama: Camille Muffat, que brilló en las etapas clasificatorias.

El punto alto de Australia proviene del sector femenino: Leisel Jones, Stephanie Rice y Jessicah Schipper se destacan entre los 53 integrantes del equipo, también integrado por el sorprendente Eamon Sullivan.

Otros históricos presentes en Shanghai serán Federica Pellegrini (Italia), y Cesar Cielo y Thiago Pereira, ambos representando a Brasil, el mejor sudamericano en Mundiales (suma tres oros). Surinam, Argentina y Venezuela son los otros países de la región que han conseguido medallas.

PUBLICADO EN ACCESS DIRECTV N°33 (JULIO DE 2011)