15 mil atletas de 205 países, 1.200 millones de espectadores en todo el planeta y 5.000 horas de grabación. Comienza la cita máxima para los amantes del deporte: los Juegos Olímpicos. Serán 19 días de fiesta en la capital inglesa.
Falta poco, muy poco.
Cada vez menos. Los interminables cuatro años de espera están por terminar. El
comienzo de la competencia futbolística, el 25 de julio, y la fiesta inaugural,
el 27, marcarán el gran inicio de la edición número 30 de los Juegos Olímpicos.
Al igual que en 1908 y 1948, Londres será la sede.
Si los
amantes del deporte esperamos cuatro años, la paciencia londinense fue incluso
mayor. La ciudad fue elegida como organizadora el 6 de julio de 2005, y desde
entonces (¡hace 84 meses!) gran parte de sus inversiones y actividades giran
alrededor de los Juegos.
Las principales obras
arquitectónicas construidas fueron dos. Una, claro, es la villa olímpica.
Aunque no resulte algo novedoso, sigue siendo impactante imaginar una
miniciudad repleta de los mejores deportistas. Miniciudad en todo
sentido: con comercios, salones de belleza, comedores, plazas y nada menos que
tres mil mesas de ping pong para que nadie se aburra. La villa, que comenzó a
edificarse en junio de 2008, consta de 62 edificios que totalizan 2.818
habitaciones.
El otro gran motivo de
orgullo de los organizadores es el Estadio Olímpico de Londres. Planeado
funcional y estéticamente por decenas de especialistas, cuenta con 80 mil
asientos y un novedoso techo colgante circular que se utilizará según las
necesidades de cada día y de cada evento, incluidas, claro, la fiesta inaugural
y la de cierre. Su costo económico, sin embargo, generó polémica en Inglaterra. Los 853 millones de dólares invertidos fueron considerados una cifra
excesiva para un estadio que, además, será parcialmente demolido tras los
Juegos por el alto gasto que generaría su mantenimiento. ¿Qué pasará con él? Se
reducirá su capacidad a 60 mil espectadores y el West Ham United, equipo de la
Premier League, lo utilizará para sus partidos como local.
El Parque Olímpico
El Estadio Olímpico
forma parte del Parque Olímpico, un espacio de 2,5 kilómetros cuadrados en el
que se desarrollará la mayor parte de los deportes. Para disminuir el daño
ecológico, y también por su belleza, se ha conseguido que en el parque convivan
más de 400 mil plantas de diferentes especies de todo el planeta.
El parque está ubicado
cerca de la villa olímpica y dentro de su territorio también se encuentran el
Copper Box (sede del handball y del pentatlón moderno), la pista de BMX, los
estadios de básquet, hockey, ciclismo y waterpolo, y el Centro Acuático, que
merece especial atención por haber sido la construcción que recibió mejores
críticas desde todos los ámbitos. La autora del centro, la arquitecta
angloiraquí Zana Hadid, creó un techo con forma de ola de 160 metros de largo.
Sus dos escenarios deportivos tienen lugar para 15 mil y 5 mil espectadores,
pero después de los Juegos, sin necesidad de demolición alguna, se modificarán
para disminuir los costos de mantenimiento, aminorando su capacidad total a
2.500 personas. En el Centro Acuático también se disputarán las finales de
handball.
A través de Londres se
esparcirá el resto de los deportes. En el Centro de Exposiciones ExCel (un área
de 400 mil metros cuadrados inaugurada en 2000 en la que se realizan todo tipo
de eventos) habrá judo, boxeo, tenis de mesa, taekwondo,
esgrima, pesas y lucha. Ubicado a 30 kilómetros del Parque Olímpico, el Centro
ExCel fue construido sobre el río Lee, otorgándole una escenografía muy
especial. En el legendario Hyde Park, inaugurado en 1637, habrá pruebas de
triatlón y natación. En el North Greenwich Arena tendrán su lugar la gimnasia y
el básquet.
El tenis se desarrollará en las míticas canchas de Wimbledon (cuyo
escenario principal tiene sitio para 15 mil espectadores y techo retráctil),
mientras que los principales partidos de fútbol se jugarán en el estadio de
Wembley.
El voley, el voley de
playa, la arquería y el tiro tendrán sus propias sedes, mientras que el bádminton
y la gimnasia artística compartirán el Wembley Arena. Fuera de Londres habrá
muy poca actividad: sólo las competencias de natación en aguas abiertas,
yachting y ciclismo de ruta, además de varios partidos de fútbol, que se
jugarán en otros cinco estadios, incluidos el famoso Old Trafford, hogar del
Manchester United, y el Millenium Stadium, ubicado en Gales.
La ceremonia inaugural
Ya sabemos que será el
27 de julio en el Estadio Olímpico, pero ¿qué más podemos anticipar de la
ceremonia inaugural de los Juegos? Un dato importante es que el director
artístico será Danny Boyle, que en su carrera cinematográfica se destacó como
director de Trainspotting, 28 días después y, especialmente, de ¿Quién quiere ser millonario?, gracias a
la cual obtuvo el Oscar en 2008.
Uno de los secretos no
tan bien guardados es la posible reaparición del Concorde, uno de los dos
aviones para pasajeros que superaron la velocidad del sonido. Construido en
1969, fue un símbolo de la evolución tecnológica hasta 2000, cuando un problema
técnico generó un accidente en el que murieron cien pasajeros. Dejó de
utilizarse en 2003, pero ya es un secreto a voces que intentarán reactivarlo
para la inauguración de los Juegos.
Bienvenidas y despedidas
Se competirá en 39
disciplinas, correspondientes a 26 deportes. Las dos grandes novedades serán el
boxeo femenino y el dobles mixto en tenis, mientras que habrá dos ausentes
respecto de Beijing 2008: el sóftbol y el béisbol.
La bienvenida, también,
es para los ingresos por venta de entradas. Solamente por ese concepto, cuando
resta todavía un mes para el inicio de la competencia, se han recaudado 680
millones de euros. Las entradas más baratas cuestan 20 libras, mientras que las
más caras superan las 2.000 libras. Los turistas no deberán llevar demasiado
abrigo, pero sí paraguas. La temperatura promedio rondará los 19°C y las
lluvias, según los cálculos de los meteorólogos, harán su aparición en uno de
cada tres eventos. Los Juegos también modificarán la rutina de miles de
trabajadores estatales, ya que las autoridades han decidido que aquellos que
puedan realizar las tareas desde su casa no viajen hasta sus lugares de trabajo
para evitar un caos de transporte.
Falta poco, muy poco.
Cada vez menos. Los cuatro años de espera están por terminar. Comienzan
nuestros queridos Juegos Olímpicos. Durante diecinueve días, el deporte nos
recordará por qué los esperamos con tantas ganas desde hace cuatro años.
PUBLICADO EN ACCESS DIRECTV Nº45 (JULIO DE 2012)
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