Por Martín
Estévez
Sabemos que los hinchas de Racing transitarán esta lista entre la admiración y el enojo. Que ninguno discutirá al uruguayo Rubén Paz ni al Chango Cárdenas, ni pedirá que el chileno Reinaldo Navia o Hilario Navarro estén entre los ídolos del club. Pero sabemos que sí se preguntarán cómo puede ser que hayamos olvidado a algún jugador que les encantaba (¿Angelillo, Adorno, Arano, Vitali, Mariano González?) y elegido a otros que tal vez no lo merecían. Por eso lo aclaramos: este recorrido por los símbolos de la Academia no es un dictamen definitivo, sino una invitación a recordar la historia, a debatir, a polemizar con otros hinchas y a disfrutar. Un homenaje a 110 hombres que, en mayor o menor medida, se pusieron la celeste y blanca que todos los hinchas quisieran ponerse y la defendieron con honor.
1) Leandro
Boloque (1903-1905)
Representa a la generación de los fundadores del club. Nació
en 1879 y jugó los primeros amistosos de la historia, entre 1903 y 1905. Presidente
de Racing en 1926 y 1942, fue el autor del que es, hasta ahora, el primer gol
registrado en la historia de La
Academia : el 21/6/1903, en el 2-1 ante Club Atlético
Argentino.
2) Juan Nelusco Perinetti
(1908-1920)
Representa a la generación de los fundadores del club. Nació
en 1879 y jugó los primeros amistosos de la historia, entre 1903 y 1905. Presidente
de Racing en 1926 y 1942, fue el autor del que es, hasta ahora, el primer gol
registrado en la historia de La
Academia : el 21/6/1903, en el 2-1 ante Club Atlético
Argentino.
3) Alberto Ohaco (1908-1924)
El paso del tiempo generó que se perdiera la dimensión de
su talento, pero Alberto Bernardino Ohaco fue un verdadero genio del fútbol. Nació
en 1889 y llegó a la Primera
de Racing a los 19 años. Era tan bueno y entendía tanto el fútbol que, siendo
un atacante brillante, cada vez que faltaba un jugador en otra posición, él lo
reemplazaba. Llegó a jugar de half, de back y hasta de arquero, en un amistoso
contra Ferro en 1920. Ascendió con Racing en 1910 (hizo 11 goles en ese torneo)
y luego ganó el heptacampeonato entre 1913 y 1919, la liga de 1921 y otros 11
títulos oficiales con la
Academia. Fue goleador del torneo durante cinco temporadas
consecutivas, de 1911 a
1915. Una vez hizo 5 goles en un partido (a Estudiantes de Buenos Aires en
1912) y siete veces marcó 4. En total, sumó 202 tantos que lo convierten en el
máximo anotador de la historia de Racing. Además, era honesto: se recuerda un
gol que le hizo a Estudiantil Porteño con la mano, no advertida por el juez. Alberto
se arrepintió, confesó la falta y el tanto fue anulado. Murió en 1950.
4) Alberto
Marcovecchio (1912-1922)
“Marcovio” fue un
goleador serial: sus 187 tantos con la celeste y blanca lo ubican segundo en la
historia. Los kilos de más lo transformaban en una topadora. En dos de los siete
títulos seguidos de Racing (1917 y 19) fue goleador del torneo. Tiene el récord
de tantos en un partido: 7 a
Unión en 1913.
5) Juan
Hospital (1912-1922)
Pichín jugaba en Independiente, pero llegó a Racing y no
se fue más. Entreala izquierdo, ganó 8 de las 11 ligas que jugó para la Acadé. Hizo 75 goles,
uno de ellos clave en la final de la
Copa de Honor 1913. Junto a Ohaco, Marcovecchio, Juan y
Natalio Perinetti formó la delantera más goleadora de todos los tiempos.
6) Francisco
Olazar (1913-1923)
El mito dice que es elmejor volante central de la
historia. Lo seguro es que fue un futbolista brillante e influyente: con él,
Racing ganó sus 8 primeros títulos y cuando se retiró, el equipo bajó su nivel.
Primer gran capitán académico, hizo 27 goles y ganó 19 torneos. Luego fue DT de
la Selección.
7) Armando Reyes (1913-1923)
Es junto a Marcovecchio el futbolista con más títulos en
el club: 20. En épocas del sistema 2-3-5, Reyes y Castagnola fueron los backs (defensores)
del Racing campeón de todo. El equipo recibía muy pocos goles, y él se
transformó en habitué durante los primeros partidos de la Selección Argentina :
llegó a jugar 20.
8) Marcos Croce (1917-1925)
Comenzó a atajar en Alumni y llegó a Racing cuando la Acadé acumulaba cuatro títulos
seguidos. Con él ganó tres más: entre 1917 y 1919 al equipo le hicieron apenas 23
goles en 52 partidos. También festejó en 1921 y 1925. Fue el primer arquero en
convertir un gol: lo hizo de penal ante Huracán en un amistoso de 1919.
9) Pedro Ochoa (1917-1931)
Ochoíta no era un entreala efectivo, sino vistoso. Le
decían el Rey de la Gambeta
y él se divertía creando lujos cada vez que podía. Metió 91 goles y ganó cinco
ligas. Es muy recordado porque aparece en la letra del tango Patadura, cantado
por Gardel: “Ser como Ochoíta, crack de la afición“.
10) Natalio Perinetti (1917-1933)
El copiloto perfecto de Ochoa, llegó con él a Primera y
se retiró apenas dos años después. Wing derecho, Perinetti terminó superando en
idolatría a su hermano Juan. Otro que jugaba para divertirse, para desafiarse a
sí mismo. Sumó 103 goles y 10 títulos en Racing, incluyendo 5 ligas. Crack
absoluto.
11) Albérico Zabaleta (1918-1923)
Una historia llena de goles y dolor. Beco apareció en el
fútbol argentino con un poder ofensivo notable: fue goleador de los torneos de
1918 y 1921, y a los 25 años ya sumaba 99 goles en Racing, pero una lesión originada
en un partido terminó llevándolo a la muerte menos de un mes después de su
último grito.
12) José Della Torre (1926-1933)
Back derecho que fue subcampeón en el Mundial de 1930 y
formó una importante dupla defensiva con Paternoster. Jugó 58 partidos en el profesionalismo,
aunque supera el centenar sumando la época amateur, y marcó 4 goles. Fue el
director técnico de Racing en el título de 1958.
13) Antonio De Mare (1926-1938)
Absolutamente identificado con Racing, jugó 142 partidos
en el profesionalismo. Half (volante) izquierdo, fue un símbolo del Racing que atravesó
24 años sin salir campeón, pero que nunca bajaba de los primeros puestos. Metió
2 goles. Luego se fue a Italia e hizo carrera como entrenador.
14) Fernando Paternoster
(1927-1932)
Nació en Pehuajó y llegó a Racing a los 23 años. Back
izquierdo, formó una tradicional dupla con Della Torre y fue subcampeón en el Mundial
de Uruguay 1930. Jugó poco en Racing cuando comenzó el profesionalismo (27 partidos)
y no hizo goles. Se destacaba por su juego limpio y lo flaquito que era.
15) José María González
(1928-1938)
Cuando Paternoster y Della Torre dejaron el club, Llamarada
(por su pelo rojo) se convirtió en bastión de la defensa. De extensa
trayectoria (155 partidos como profesional), era rudo y apostaba al cuerpo a
cuerpo para desestabilizar al rival. Hincha de Racing, nunca pudo festejar un
gol propio.
16) Vicente Del
Giúdice (1928-1939)
Debutó a los 17 años y muy rápido se ganó un lugar como
entreala (una especie de mediapunta, de delantero retrasado) izquierdo. En la
época amateur hizo 18 goles en tres años. Ya en el profesionalismo, sumó 58 más
en 132 partidos. En 1938 tuvo un breve paso por Talleres de Escalada.
17) Juan
Botasso (1931-1935)
Como Goycochea en el 90, llegó a Racing después de ser
subcampeón mundial, en su caso en 1930. Durante cinco temporadas, la Cortina Metálica
se ganó el respeto de los hinchas por su estilo sobrio. Sumó 152 partidos en
Racing y luego volvió a su club de origen, Argentino de Quilmes. Falleció en 1950.
18) Vicente Zito (1933-1944)
Uno de los mejores jugadores durante los 24 años sin
títulos. Le decían la
Bordadora y era talentoso en serio. Goleador, clavó 73 en 208
partidos. Junto al Chueco García le dieron sonrisas a la Academia en años en los
que la costumbre de ser campeón había desaparecido.
19) Evaristo
Barrera (1933-1938)
Una especie de Colorado Sava infalible y corpulento, el
rosarino es el máximo goleador de Racing en la era profesional, gracias a 136
gritos en apenas 142 partidos. Máximo anotador en los torneos del 34 y 36, el
Omnibus llegó de Instituto, ganó la Copa Competencia de 1933 y se retiró en el fútbol
italiano.
20) Alejandro Scopelli (1936-1937)
Está más identificado con Estudiantes (fue parte de una
mítica delantera, los Profesores), pero considerarlo ídolo es el premio por su
magnífico aporte goleador: 44 tantos en 60 partidos en el club, altísimo
promedio. Antes, el Conejo había jugado el Mundial del 30 y pasado por Portugal
e Italia.
21) José García (1936-1946)
Un half izquierdo de poca llegada al arco rival (7 goles),
pero con buen estado físico y quite. Nacido en Avellaneda, arribó desde El
Porvenir y fue titular de modo casi permanente. Alcanzó los 272 partidos en
Racing, que lo transforman en el 7º jugador con más presencias en la historia.
22) Enrique García (1936-1944)
El Chueco fue uno de los mejores wings (delanteros que
jugaban por los costados) de la historia. Se movía siempre por la izquierda e
impactaba con su velocidad y talento. Autor de 78 goles en 233 partidos, es
considerado el mejor jugador de Racing en el primer gran período sin títulos
(1925-1949).
23) Delfín Benítez Cáceres
(1939-1941)
Un delantero que también está más identificado con otro
equipo (Boca) pero es querido por los hinchas porque dejó todo con la celeste y
blanca. El paraguayo llegó a los 28 años, con su carrera ya hecha, y marcó 65
goles en los 84 partidos que jugó. Su despedida fue con gol y triunfo ante
Independiente.
24) José
Salomón (1939-1945)
Llegó a Racing con perfil muy bajo, desde Talleres de
Remedios de Escalada cuando apenas tenía 22 años, pero pronto demostró ser un
muy buen back derecho, al punto que jugó 44 partidos para la Selección. En la Academia sumó 215
encuentros y, para dejar claro que lo suyo era defender, no hizo goles.
25) Higinio García (1940-1952)
Suplente de Salomón, probó suerte en Tigre (1946) y
Atlanta (47). Volvió a Racing en 1948 y, a partir de entonces, se convirtió en
el indiscutido back derecho. Con García Pérez conformó la sensacional dupla
defensiva que ganó el tricampeonato. Jugó 133 partidos y metió 23 goles, varios
de tiro libre.
26) José
Manuel García Pérez (1942-1957)
Difícil mencionarlo sin pensar en Higinio García. Los dos
eran backs, debutaron en
Racing, pasaron por Tigre, volvieron al club y
conformaron la dupla defensiva del tricampeón 1949/51. También formó dúo con
Dellacha, cuando Higinio se fue. Totalizó 224 partidos, sin goles.
27) Roberto D’Alessandro
(1943-1947)
Después de meter 52 goles con la roja y blanca, River lo
relegó a ser suplente y D‘Alessandro viajó hacia Avellaneda. En Racing, el
centrodelantero jugó cinco años con alta efectividad: 64 goles en 99 partidos. Cuando
Rubén Bravo llegó al club, perdió terreno, pero sus goles aún merecen aplausos.
28) Ezra Sued (1943-1954)
Excéntrico desde el nombre, desde la estampa para jugar,
desde los movimientos eléctricos como wing. Nada menos que 12 años con la
camiseta de Racing, 308 partidos
(5º en la historia), 47 goles y el tricampeonato compartiendo
con Simes la izquierda del ataque. Crack de verdad.
29) Rubén Bravo (1946-1952)
Uno de los mejores centrodelanteros de la historia del
club. Rosarino, el Maestro llegó desde Central y no le costó adaptarse. Figura
clave en el famoso tricampeonato, cuando él se fue a Chile el equipo perdió
peso ofensivo. Jugó 149 partidos y metió 88 goles en la Academia.
30) Ernesto
Gutiérrez (1947-1954)
De físico pequeño, siguió la tradición de José García: un
half izquierdo dedicado casi exclusivamente a defender. El Rey Petiso era un
gran ayudante de los backs y hacía el
trabajo sucio en el Racing tricampeón. Tras 226 partidos
y 3 goles en el club, se fue al Celta de Vigo. Murió en 2010.
31) Manuel Blanco (1948-1957)
Salvini, Méndez, Bravo, Simes y Sued fueron la delantera
del tricampeón, pero cuando faltaba alguno de los tres atacantes centrales,
Blanco era fija. Luego, cuando se fue Bravo, disfrutó de algunos años de
titularidad. Jugó 157 partidos e hizo 57 goles, tres de ellos en un 4-2 ante
Independiente.
32) Antonio Rodríguez (1948-1951)
En cuatro temporadas en la Acadé , ganó tres títulos y
estuvo cerca en el 48. Luego de atajar en River, Tigre y Lanús, Racing lo trajo
en una época en la que el campeonato era una obsesión, y él cumplió demostrando
mucha agilidad. Dejó el fútbol enseguida, para iniciar su carrera en la
política.
33) Norberto Méndez (1948-1954)
Junto a Sued, fue la magia del Racing tricampeón. Entreala
derecho, llegó de Huracán y enamoró a una hinchada que lo idolatró por su
fútbol alegre. Sonreía, Tucho, porque la pasaba bien jugando al fútbol. Disputó
129 partidos y metió 48 goles en el club. Es el máximo goleador de la Copa América.
34) Llamil
Simes (1948-1955)
Todo para adorarlo: tres veces campeón, 5º goleador
histórico (106 gritos), autor del primer tanto luego de la construcción del
estadio en 1950 y socio ideal de Sued en la delantera. El cordobés era entreala
izquierdo. Llegó desde Huracán, jugó 179 partidos en el club y luego pasó a
Tigre.
35) Alberto Rastelli (1949-1955)
Probablemente, el mejor centrehalf desde Olazar. Llegado
desde Gimnasia, su aporte se condensó en el tricampeonato. En ese período jugó
78 de sus 89 partidos. Después estuvo poco, perjudicado por lesiones, y se
retiró. Junto a Gutiérrez eran el terror de los talentos rivales. Marcó 2 goles en el
club.
36) Mario Boyé (1950-1953)
Con un remate feroz, el Atómico marcó uno de los diez
goles más importantes del club: el de la final ante Banfield en 1951. De previo
paso por Boca y el fútbol colombiano, había llegado para pelear el lugar de wing
derecho con Salvini. Cumplió con creces: 84 partidos, 33 goles y dos campeonatos
ganados.
37) Juan
Carlos Giménez (1951-1957)
Llegó desde Huracán a un Racing bicampeón. Había una
delantera temible, y él encajó bien en la derecha de una línea de halfs defensivos,
como Rastelli y Gutiérrez. Su nivel creció y llegó a la Selección , con la que
ganó el Sudamericano 57. Sumó 170 partidos, sin
goles, y luego fue DT de Racing un puñado de veces.
38) Rogelio Domínguez (1951-1957)
Surgido del club, fue el mejor arquero argentino de la
década del 50. En Racing jugó 121 partidos, ganó el título del 51 (era
suplente) y por su altísimo nivel llegó a la Selección. Luego
de ganar el Sudamericano 57, lo compró el Real Madrid, donde compartió equipo con
Di Stéfano y Puskas. Murió en 2004.
39) Arnaldo Balay (1952-1958)
Racing se lo compró a Los Andes para que fuera centrehalf
suplente, pero Rastelli se lesionó y Palito ganó la titularidad con un estilo
opuesto. Él mismo lo dijo: “Jamás di una patada. Yo gambeteaba y gambeteaba”. Jugó
117 partidos, marcó un gol y en su último año en el club festejó el título.
40) Pedro Dellacha (1952-1959)
El gran defensor de los primeros 30 años del profesionalismo.
Don Pedro del Área reemplazó a Higinio García y terminó superándolo en
idolatría. Peleaba cada pelota como si fuera la última, pero en serio. Jugó 184
partidos (un gol). Con la
Selección fue campeón sudamericano en 1957. Murió en 2010.
41) Juan José
Pizzuti (1952-1962)
Una leyenda. Nació en 1927 y comenzó en Banfield, donde
fue goleador del campeonato de 1949. Pasó por River y llegó a Racing en el 52.
Entreala derecho, atacante tirado atrás y creativo, fue goleador del campeonato
en el 54, pero el equipo no funcionaba y él no la pasaba bien. “Corría todas
las pelotas, me desgastaba inútilmente”, reconoció más tarde. Se fue a préstamo
a Boca y volvió en el 56, renovado y lleno de goles: hizo 118 en 215 partidos
en la Academia
(4º máximo anotador de la historia). Junto a Corbatta, Sosa y Belén se destacó
en el equipo campeón en 1958 y 1961. Luego, como entrenador, ganó el torneo local,
la Copa Libertadores
y la Intercontinental
con el recordadísimo Equipo de José.
42) Vladislao Cap (1954-1960)
Llegó junto a Maschio y Sívori, y peleó el puesto con
Balay. Le costó, pero se afirmó como centrehalf titular y llegaron los éxitos: campeón
con Racing en 1958 y con Argentina en el Sudamericano 59. Jugó 135 partidos,
metió 3 goles (uno vital a Lanús en el 58) y fue DT de la Selección en el Mundial
de 1974.
43) Humberto Maschio (1954-1968)
Un referente del fútbol argentino. Nació en Avellaneda en
1933 y llegó a Racing en el 54. Al principio jugaba como delantero, pero de a
poco fue tirándose atrás y aprendiendo a armar juego. La descosió y fue
goleador en el Sudamericano 57, el de los famosos Carasucias. Ese año fue
transferido a Italia e hizo una espléndida carrera en Bologna, Atalanta, Inter
y Fiorentina. Lo citaron para la selección italiana y terminó siendo su capitán
en el Mundial de 1962. A
los 33 años, cuando parecía que su carrera terminaba, Pizzuti le pidió que volviera
a la Argentina
para conducir a Racing. Hacía una década que nadie lo veía jugar y había dudas,
pero el Bocha parecía un superhéroe: corría como un pibe, asistía, metía goles,
ordenaba a sus compañeros. Con él, el Equipo de José dio un salto de calidad
que le permitió ser campeón de Argentina, de América y del mundo. En total,
jugó 162 partidos y metió 51 goles en Racing. Fue entrenador de la Selección y de
Independiente. Luego quedó ligado al club en diferentes funciones. Incluso fue
dos veces entrenador, la última en 1999 y 2000 junto a Gustavo Costas.
44) Oreste Osmar Corbatta
(1955-1962)
Habilidoso hasta la exageración, el Loco era wing
derecho, pero jugaba de lo que quisiera. Gambeteador incansable, astuto para
definir, lo compararon con el brasileño Garrincha. Debutó en la Academia a los 19 años y
enseguida llegó a la
Selección , con la que ganó el Sudamericano 57, el de los famosos
Carasucias. Después jugó el Mundial 58 y, pese a los malos resultados, fue el
mejor del equipo y metió 3 goles. También obtuvo el Sudamericano 59. Con Racing
fue campeón en 1958 y 1961, formando combinaciones explosivas con Pezzuti y el
Marqués Sosa. Murió en 1991, con la salud arruinada por su descuidado estilo de
vida.
45) Norberto Anido (1955-1965)
Nacido en Avellaneda, empezó como suplente de Dellacha. Pedro
dejó el club y él fue back titular hasta completar 205 partidos (sin goles). Campeón
en 1958 y 1961, ese año junto a su compinche Mesías. Ya lo dicen en El secreto de
sus ojos: “No es lo mismo Anido, que Anido con Mesías”.
46) Osvaldo Negri (1956-1963)
Arquero surgido del club, tenía delante suyo a Rogelio
Domínguez. Su debut fue un triste 2-3 contra Argentinos Juniors, y cuando
Rogelio se fue, tuvo la presión de reemplazarlo. Se la bancó y fue campeón en
el 58 y 61, totalizando 147 partidos. En el 59 ganó el Sudamericano con la Selección.
47) Pedro
Manfredini (1957-1958)
Héroe fugaz, llegó desde Mendoza y encontró lugar como
centrodelantero al lado de Pizzuti y Corbatta. En dos temporadas en Racing metió 28 goles en 39 partidos y ganó
el título del 58. Campeón en el Sudamericano 59 con la Selección , fue
transferido a la Roma :
resultó goleador de la temporada 62/63.
48) Raúl Belén (1957-1964)
Wing izquierdo, la Bruja era rapidísimo y asistidor. Rosarino,
cuando llegó llevaba 18 meses sin jugar, pero encontró ritmo enseguida. Tenía
una gambeta indescifrable. Jugó 174 partidos e hizo 41 goles en Racing, donde fue
campeón en el 58 y 61. Con la
Selección disputó el Mundial 62. Murió en 2010.
49) Rubén
Sosa (1958-1964)
Durante años fue dueño de la izquierda del ataque junto a
Belén. El Marqués era entreala con alma de goleador: pateaba seguido y cabeceaba
bien. Marcó 81 goles (5 a
Independiente) en 151 partidos y fue dos veces campeón. En el 59 ganó el
Sudamericano con la
Selección. Luego jugó en Uruguay. Murió en 2008.
50) Pedro Mansilla (1960-1963)
Llegó desde Boca a un Racing que había perdido gol sin
Manfredini. Tuvo un paso corto (63 partidos), pero sus 23 goles le alcanzaron
para ser ídolo. “Qué fácil era jugar con Corbatta y Belén -contó-. Sólo tenía
que ir a buscar la pelota en el borde del área, porque sus centros me caían al
pie, y empujarla”.
51) Federico Sacchi (1961-1964)
Fue un distinto. Para decirlo claro: el defensor más técnico
que vio Racing en los primeros 40 años de profesionalismo. Llegó de Newell’s,
salió campeón en su primera temporada y habitualmente hizo dupla con Anido. Jugó
el Mundial 62 y después se fue a Boca. En la Academia totalizó 92 partidos
y 13 goles.
52) Juan Carlos Mesías (1961-1965)
El uruguayo fue parte del proceso en que los halfs izquierdos
se convirtieron en marcadores de punta. Se adueñó del puesto muy rápido (sólo
faltó a un partido en el 61) y formó una dupla impasable con Anido en la
izquierda. Jugó
105 veces y metió 3 goles
en Racing. Murió en 2002, en Buenos Aires.
53) Juan Carlos Cárdenas
(1962-1976)
Nacido en Santiago del Estero, el Chango debutó en Racing
a los 17 años, pero no encontró continuidad y se fue a préstamo a Nueva
Chicago. Volvió en el 64 y entonces sí comenzaron sus goles. 1, 2, 3, hasta
llegar a 92 en 321 partidos en la Academia. Uno de ellos es mítico: el zurdazo
sensacional desde otra galaxia que clavó en el ángulo del arco del Celtic
escocés para convertir a Racing en el primer campeón del mundo de la Argentina. Pero su
idolatría no se sostiene sólo por ese gol. De hecho, el Chango hizo otro muy
importante: cuando la segunda final estaba 1-1 y Celtic dejaba a Racing con las
manos vacías, metió sobre la hora el 2-1 que envió todo a un tercer partido.
54) Agustín Mario Cejas
(1962-1980)
Debutó en Racing a los 17 años. Se destacaba por su
inteligencia, aplicando las matemáticas para achicar los ángulos de los delanteros.
Fue arquero del histórico Equipo de José, campeón de Argentina, América y el
mundo. Se fue en el 70 al Santos de Pelé y volvió en el 77, totalizando 334
partidos en el club.
55) Oscar Martín (1963-1967)
Llegó a Racing cuando era un experimentado de 28 años,
para comandar a un grupo de jóvenes entre los que estaban Perfumo y Basile. Martín,
marcador lateral derecho, era un derroche de sacrificio permanente y se
convirtió en el capitán del Equipo de José. Jugó 172 partidos en Racing, sin
goles.
56) Roberto Perfumo (1964-1970)
El Mariscal era volante por izquierda hasta que Juan José
Pizzuti le encontró el puesto: marcador central derecho. Nacido en Avellaneda el
3 de octubre de 1942, Perfumo aprovechó una época de reglamento permisivo para
jugar siempre al límite de la agresividad. Marcaba con firmeza extrema,
intimidaba a los delanteros con cruces fuertes desde los primeros minutos. Admiraba
a Federico Sacchi, con el que llegó a compartir equipo, pero su estilo era completamente
opuesto. Con Alfio Basile conformaron una joven dupla central que terminó siendo
histórica: juntos ganaron el campeonato de 1966, la Copa Libertadores
y la
Intercontinental. Su trayectoria en Racing fue extensa y
coincidió con un gran momento del club. En sus siete temporadas con la celeste
y blanca jugó 232 partidos y gracias a su cabezazo y sus remates potentes,
metió 16 goles, 3 de ellos a Independiente. En aquellos años era habitualmente convocado
a la Selección :
estuvo en los Juegos Olímpicos de 1964, en el Mundial 66 y sufrió las
Eliminatorias del 70, en las que Argentina no consiguió la clasificación. Fue transferido
al Cruzeiro de Brasil, volvió a disputar un Mundial en 1974 y un año después
retornó al país para jugar en River, con el que ganó tres títulos. Se retiró en
1978 y comenzó su carrera como director técnico en Sarmiento de Junín. En 1991
asumió en un Racing que venía de una pobre campaña en el Apertura (17 puntos) y
generó ilusión en los hinchas. Juntó a Rubén Paz con Ortega Sánchez, el recién
llegado Turco García y apostó por el desconocido Betito Carranza. También hizo
debutar a Juan Ramón Fleita. El equipo peleó el título hasta que se cruzó con
el Boca de Tabárez, finalmente primero, que le ganó 6 a 1. Tras ese cuarto puesto, los
buenos resultados no volvieron y la mala relación con Rubén Paz terminó en su
renuncia. Continuó como DT algunos años más y actualmente se dedica al
periodismo.
57) Alfio Basile (1964-1970)
El Coco nació en Bahía Blanca el 1º de noviembre de 1943.
Su carrera tiene muchas similitudes con la de Roberto Perfumo: ambos surgieron
en Racing, debutaron en 1964 y los cambiaron de puesto. Basile era volante
central hasta que Juan José Pizzuti lo envió a jugar como marcador central izquierdo.
Al lado, claro, de Perfumo. Juntos fueron el sostén de un equipo muy ofensivo. El
Coco, grandote, no se quedaba atrás a la hora de repartir murras. Campeones de
Argentina, de América y del mundo entre 1966 y 1967, Basile se fue de Racing en
1970. Sí: el mismo año en que se fue Perfumo. Acumuló 186 partidos y 20 goles
en la Academia
y terminó su carrera en Huracán. Claro que el Coco le sumó muchos puntos a su
idolatría por lo que hizo luego como director técnico. Primero, agarró al equipo
en la B y le dio el
empujón clave para volver a Primera en el 85. Después llevó a Racing a ganar la Supercopa 88, eliminando
a Santos, River y Cruzeiro. Y siguió yendo y viniendo. Primero en el 96, ante la
salida de Brindisi; logró un 4º puesto en el Apertura, llegó a semifinales de la Libertadores 97 y,
tras el duro golpe de la eliminación, renunció en la 2ª fecha del Apertura. Después
en 2012, pero ya con malos resultados y sin poder manejar a un grupo difícil
que incluía al insoportable Teo Gutiérrez. En el medio, había dirigido a la Selección en dos etapas
diferentes. Entre 1991 y 1994 ganó dos veces la Copa América y estuvo
invicto durante 31 partidos, pero en el Mundial lo eliminó Rumania. En su
segunda etapa, se fue durante las Eliminatorias 2010.
58) Juan
Carlos Rulli (1965-1970)
Volante pampeano, arrancó en Estudiantes y Boca sin brillar.
Llegó a un Racing con nombres fuertes y se dedicó al trabajo poco visible de
recorrer la banda derecha, más ayudando en la marca que creando. Titular en el
campeón del mundo, jugó 201 partidos y metió 9 goles. Luego dirigió al equipo
sin éxito.
59) Jaime
Donald Martinoli (1965-1968)
Proveniente de Banfield, fue goleador del Equipo de José
en 1966, con 18 tantos. Delantero por la derecha, rápido, se distinguía por sus
centros desde posiciones incómodas. En el 67 lo persiguieron las lesiones y no
pudo jugar la
Copa Intercontinental. Sumó 88 partidos y 37 goles en la Academia.
60) Juan José
Rodríguez (1965-1967)
Entrerriano, jugaba de volante o de delantero, siempre
por izquierda. Fue vital en la conquista de la Libertadores 67,
anotando 6 goles. El Yaya estuvo también en el glorioso 1-0 a Celtic en Montevideo. Su estadía
en Racing fue corta pero muy exitosa. Las estadísticas: 105 partidos, 37 goles
y tres títulos.
61) Rubén
Osvaldo Díaz (1965-1978)
A los 20 años, el Panadero soportó el peso de ser titular
en el Equipo de José. Era back pero Pizzuti lo puso de marcador de punta
izquierdo. Se destacó por su aporte en ataque: hizo 18 goles en 246 partidos. Se
fue en el 72 y volvió en el 77. También jugó en Atlético de Madrid y San
Lorenzo.
62) Miguel
Ángel Mori (1966-1968)
Campeón en 1964 con Independiente, sería persona no grata
si después no hubiera jugado en Racing con buen nivel y no hubiera sido campeón
argentino, de América y del mundo. En 94 partidos, hizo 4 goles. Antes de su
muerte en 2009, dijo: “Quiero más a Racing que a Independiente”.
63) Enrique
Wolff (1967-1972)
Un distinto. Su despegue se demoró porque quiso terminar
el secundario. Era un volante talentoso, pero le pidieron que jugara de lateral
derecho y aprendió rápido. Fanático de Racing, disputó 165 partidos y metió un
montón de goles: 31. Jugó en River y Real Madrid, y fue capitán de la Selección en el Mundial
74.
64) Norberto
Raffo (1967-1969)
En 1966, Pizzuti demostró sabiduría al pedir a Raffo: el Toro
se ensambló perfecto en un equipo campeón. Delantero que se movía por el centro
y la izquierda, fue el goleador de Racing en la Libertadores 67 (14
gritos) y metió uno en la segunda final intercontinental. Sumó 63 partidos y 26
goles. Murió en 2008.
65) Walter
Machado Da Silva (1969)
Jugó apenas un año, pero los que lo vieron dicen que era
un goleador bestial. El brasileño había estado en el Mundial 66 y llegó a los 29
años. Cabeceaba muy bien y sus definiciones eran geniales. En su única temporada
jugó 28 partidos y metió 18 tantos. Fue el goleador del Metropolitano 1969.
66) Carlos
Squeo (1969-1984)
Lo querían porque jugaba como jugaría cualquier hincha. No
paraba de correr aunque el cuerpo le pidiera piedad. Tenía su propio puesto:
era quitador. Podía ser lateral o volante derecho, o mediocampista central. En
tres etapas en el club, acumuló 306 partidos y 36 goles. Jugó el Mundial 74.
67) Alberto
Jorge (1970-1975)
Sus primeros cinco años fueron aceptables. Volante ofensivo
que no descollaba, el Pampa aportó prolijidad y técnica. El último lo elevó a
ídolo: cuatro goles a Independiente en un partido (triunfo 5-4) y 12 en la
temporada. En total, 167 partidos y 39 goles. Luego se fue a México. Dirigió a Racing
en 2000.
68) Ubaldo
Fillol (1972-1989)
Para muchos, el mejor arquero en la historia de Racing. Volador,
atajapenales, rápido, el Pato llegó de Quilmes, pero en el 73 se fue a River. Campeón
mundial en 1978, volvió en el 87,
a los 36 años. No importó: mantuvo su gran nivel y fue campeón
de la Supercopa. Dirigió
al club en 2004.
69) Roberto
Díaz (1975-1983)
Tosco y todo, el Ropero es el máximo goleador en los últimos
40 años: metió 51 en 244 partidos. Grandote (su apodo lo dice todo), aguantaba
la pelota por la derecha en años difíciles para el club. Se fue en el 80 y
volvió en el 82 para presenciar desde adentro el momento más triste: la caída a
la Primera B.
70) Julio
Jorge Olarticoechea (1976-1990)
Gran todoterreno, el Vasco arrancó de volante por derecha
y después fue lateral, pero también supo ser volante de marca. En 1981 pasó a
River, en el 86 ganó el Mundial con la Selección y volvió a Racing en el 88 para
derrotar 1-0 a
Independiente con gol suyo. En total, 239 partidos y 13 goles en la Academia.
71) Juan
Barbas (1977-1981)
El jugador más habilidoso de Racing en la década del 70. Y
encima, de origen humilde, perfil bajo y surgido en el club: la gente lo amaba.
Volante por derecha con mucha clase, fue campeón mundial juvenil en 1979 y jugó
en España, Italia y Suiza. Dirigió a las inferiores y al equipo principal.
72) Roque
Avallay (1977-1979)
Lo contrataron cuando ya tenía 33 años, pero él no
permitió dudas con un promedio de gol espeluznante para su época: 30 tantos en
60 partidos. Jugó tres temporadas y su alejamiento se sintió. Delantero
infalible, totalizó 184 goles en el fútbol argentino.
73) Juan
Ramón Carrasco (1980-1981)
Jugó dos años, parecieron más. El uruguayo era de perfil
alto y poca humildad: era un crack y lo sabía. En la cancha tenía similitudes con
Rubén Paz: panorama, inteligencia y una pegada fabulosa. Venía de River y
demostró personalidad en un equipo con poca personalidad. Jugó 55 partidos y
metió 28 goles.
74) Gustavo
Costas (1982-1995)
“Y chupe, chupe,
chupe, no deje de chupar, ¡que Costas es lo más grande del fútbol nacional!“,
cantaba la Guardia
Imperial y a él, que no era un talentoso ni tenía un estado
físico imponente, se le llenaban de aire los pulmones y ponía incluso más de lo
que podía poner. Gustavo Adolfo Costas es el símbolo histórico de la Academia. Su vida es
Racing: fue mascota del equipo campeón del mundo, sufrió el descenso a la B , logró el ascenso dos años
después, ganó la Supercopa
en el 88, se fue a Suiza y volvió rapidito, para no perder el tiempo lejos de
la celeste y blanca, para transformarse en el jugador con más partidos en la historia
del club: 337. La despedida fue triste, porque Brindisi lo dio de baja en 1996
y terminó su carrera en Gimnasia de Jujuy. Pero otra vez volvió enseguida, tres
años después, para ser director técnico en dupla con el Bocha Maschio. En el
Apertura 99 hizo magia, generó mística en un plantel limitado y sacó 30 puntos
que terminaron siendo vitales para mantener la categoría. Se fue en 2000, pero
cuando Racing salió campeón en 2001 encontró la forma de decir presente: el equipo
que dirigía, Guaraní de Paraguay, jugó un amistoso con el Racing del paso a paso
apenas dos días después del título. Y fue otra vez técnico en 2007, cuando soportó
el maltrato del gerenciador De Tomaso. Costitas era un marcador central con una
técnica extraña, desgarbado, pero genial tiempista, con un corazón enorme,
incapaz de defraudar a sus compañeros. Los más fanáticos recuerdan uno de sus 9
tantos en el club, tremendo golazo a Rosario Central en 1994: la levantó en
mitad de cancha, hizo jueguito, pateó de aire desde 40 metros y la pelota
pegó en el palo y entró. Y la tribuna, claro, cantó: “... que Costas es lo más
grande del fútbol nacional“.
75) Walter
René Fernández (1985-1989)
La década del 80 fue una colección de futbolistas que fracasaron
hasta que él y Colombatti llegaron para lograr el ascenso en 1985. Walter gritó
dos veces en la primera final con Atlanta. Santafesino, era un wing izquierdo
que miraba seguido el arco: 39 goles en 149 partidos. En el 88, la rompió en la Supercopa.
76) Miguel
Ángel Colombatti (1985-1990)
Aterrizó en Racing a los 29 años. Venía de Morón, pero la
camiseta no le pesó y fue decisivo en el ascenso del 85. Ya en Primera, sostuvo
su gran nivel y fue protagonista en la Supercopa de 1988, marcando un gol en la final. Volante
ofensivo y gran pasador, jugó 154 partidos y metió 35 goles en el club.
77) Ramón
Ismael Medina Bello (1986-1989)
Nació en Gualeguay, vivió en la pensión y desde su debut
demostró ser un delantero potente y sin vergüenza: si su tiro terminaba a
metros del arco, enseguida volvía a intentar. El Mencho sumó 124 partidos y 26
goles, y ganó la
Supercopa. Luego pasó a River. Integró la Selección en el Mundial
94.
78) Néstor
Fabbri (1986-1992)
Llegó a los 18 años y a los 20 ya era líder: un cabezazo
suyo eliminó a River e impulsó a Racing a ganar la Supercopa. Marcador
central izquierdo, él mismo se definió: “Compensaba con mi velocidad mental
cualquier lentitud física”. Jugó 198 partidos e hizo 7 goles. Estuvo en el
Mundial 90.
79) Omar Catalán
(1987-1988)
Su carrera hubiera sido del montón, porque incluso en Racing,
siendo delantero, metió 4 goles en 25 partidos. Pero hizo el que tenía que
hacer: en la final de la
Supercopa al Cruzeiro, uno de los más importantes de la
historia. Antes era de Independiente; seguro que ese hecho cambió los colores
de su corazón.
80) José Raúl
Iglesias (1987-1989)
“Váyase preparando, vaya gritándolo, porque en cualquier
momento aparece el Totigol”, cantaba la hinchada. El Toti tenía carisma:
delantero valiente, festejaba cada tanto con una voltereta. Estuvo poco, pero
sus 44 partidos y 19 goles impactaron fuerte en la memoria racinguista.
81) Rubén Paz
(1987-1993)
La atracción que genera en el hincha de Racing es tan grande
que, pese a no haber sido campeón argentino ni ganar la Intercontinental ,
el cariño por él no es menor que los que generan Basile, Perfumo o Cárdenas. Rubén
venía demostrando calidad en la selección de Uruguay, con la que jugó el
Mundial 86, y llegó a la
Academia en el 87. Es cierto que era lagunero: a veces
pasaban diez, quince minutos de un partido y no la tocaba. Pero eran siempre los
minutos menos trascendentes. Cuando la pelota les empezaba a quemar a los
demás, él la pedía y se hacía cargo del ataque del equipo. Sus tiros libres
apenas pueden ser comparados con los de Carrasco o Capria. El resto debería
mirar sus videos y aprender. El Rúben ganó la Supercopa 88, anduvo
cerca del título en el Apertura 91 (se desgarró justo antes del partido
decisivo contra Boca) y después comenzó relaciones conflictivas con los
técnicos, que le pedían mayor compromiso. Totalizó 152 partidos y 33 goles. Se
le recuerdan tantos extraordinarios, como un tiro libre ante Gimnasia y un
remate de mitad de cancha ante Unión, ambos en el 91. Siguió jugando en el fútbol
uruguayo incluso después de cumplir 40 años.
82) Carlos
Ángel Roa (1989-1993)
Arquero surgido de inferiores, Lechuga era volador y de
buenos reflejos. Fue titular durante años (completó 116 partidos), aunque en
1990 se contagió paludismo en una gira por Africa y estuvo varios meses sin
jugar. Tuvo una gran carrera: brilló en el Mallorca y eliminó a Inglaterra en
el Mundial 98.
83) Claudio
Omar García (1991-1995)
Llegó de Francia y se ganó a la gente corriendo por las
puntas, aguantando la pelota e inventando festejos para sus goles. Ovacionado
incluso en malos momentos, sumó 129 partidos y 27 tantos. Ah: se bajó los
pantalones ante la hinchada de Independiente. Con la Selección , ganó la Copa América dos
veces.
84) Juan
Ramón Fleita (1991-1996)
Víctor Hugo Morales lo apodó “el hombre de las mil
definiciones”: hizo goles de derecha, zurda, cabeza, tijera, palomita, chilena
y rabona. Los dos últimos, a Chilavert. El Lagarto la rompió en el 93, en dupla
con el Piojo López. Sus números: 122 partidos y 27 goles. Se enamoró del club:
va siempre al Cilindro.
85) Ignacio
González (1991-1997)
Arquero, se recuperó de un mal debut (2-3 ante Mandiyú)
con personalidad. Nacho tomó el puesto en el 94 y lo sostuvo durante 154
partidos. Pateador de penales (hizo 8), también los atajó en la Libertadores 97 para
llevar a Racing a semifinales. Jugó en la Selección. En 2013
es el entrenador de arqueros.
86) Claudio
Javier López (1992-2007)
Explotó en el 93 y empezó una carrera memorable: la
rompió en la 95/96, es un dios en Valencia, 55 partidos en la Selección , títulos en
Italia y México. Volvió, como había prometido, para poner el pecho en un
momento difícil. Wing supersónico y generoso, sumó 156 partidos y gritó 37
goles.
87) Fernando
Quiroz (1993-2000)
De Racing desde la cuna, se le cumplió el sueño cuando llegó
desde Huracán. Volante central técnico, Teté jugó sus 138 partidos con el
corazón. Hizo 10 goles y soportó muchas lesiones y las peores épocas del club,
hasta que se retiró súbitamente en 2000. Dirigió a la Academia en 2005 y 2006.
88) Carlos
Galván (1994-1998)
El Negrazo, corpulento marcador central moldeado en
inferiores, se ganó la titularidad con Maradona de DT. Lento, pero gran
cabeceador, fue subcampeón en el 95 y capitán en el 98. Formó dupla con Claudio
Ubeda. Disputó 133 partidos e hizo 2 goles. Luego se destacó en el fútbol
brasileño.
89) Pablo
Michelini (1994-1999)
El amor por él fue de menor a mayor. Surgido en Español,
el Pulpo se paraba en el mediocampo y los corría a todos. Fue el jugador con
más despliegue en la década del 90. Lo suyo era recuperar y tocar corto. En sus
últimos torneos lo ovacionaban siempre. Sumó 167 partidos y 4 goles en la Academia.
90) Marcelo
Delgado (1995-1999)
En su 7º partido, golazo a River. En el 8º, le empató a
Independiente sobre la hora con un tres dedos inolvidable. A partir de ahí, el
“Chelooo, Chelooo” se hizo constante. Delantero por afuera con gloriosa pegada,
jugó 149 partidos y metió 45 goles. Estuvo en el Mundial 98 y luego pasó a
Boca.
91) Rubén
Capria (1995-2006)
El mejor pateador desde Rubén Paz. El Mago fue de los
pocos que se bancaron ponerse la 10 de Racing. En su torneo debut le hizo tres
goles a Boca y fue subcampeón. En sus tres períodos en el club, jugó 142
partidos y metió 41 goles. En el último paso, ya con 36 años, siguió mostrando
su talento.
92) Claudio
Úbeda (1995-2006)
Marcador central izquierdo, en la Libertadores 97 hizo 4
goles. Luego Racing se vino a pique y le cantaban “Uuuubeda” cada vez que revoleaba
la pelota. Capitán durante años, su premio fue ganar el Apertura 2001. Así, el
“Uuuubeda” se transformó en un inmenso homenaje. Jugó 329 partidos y metió 14
goles.
93)
Maximiliano Estévez (1998-2008)
Delantero bajito y caradura para encarar, el Chanchi se ganó
el puesto a mediados del 99. Le hizo tres goles a Unión en 2000 y se fue a
España, pero volvió para salvar a Racing de la Promoción. Goleador
del campeón 2001, es también máximo anotador del club en torneos cortos. Sumó 190
partidos y 45 goles.
94) Adrián
Bastía (1998-2008)
El Polaco surgió como como un recuperador poco ortodoxo
que se iba expulsado muy seguido. De a poco se afianzó y empezó a jugar con
inteligencia, a correr la cancha de otro modo. Ídolo absoluto en el campeonato
de 2001, se fue en 2003 y volvió en 2006, alcanzando los 213 partidos y 10
goles.
95) Diego
Milito (1999-2003)
En unas divisiones inferiores descuidadas, se había
destacado con cuatro goles en un partido contra Independiente y un título con la Cuarta. Sin embargo,
recién debutó a los 20 años. El club estaba en ruinas y él peleaba solo en
ataque. En sus primeros 44 partidos apenas había hecho 2 goles. La gente lo
bancó siempre y cuando llegó Merlo, en 2001, el arco se le empezó a abrir de a
poco. Campeón en el Apertura (con gritos importantes ante Newell's y Colón), en
los siguientes cuatro torneos fue goleador del equipo. Luego de 148 partidos y
37 goles, lo vendieron al Genoa de Italia y comenzó una fabulosa carrera en
Europa en la que ganó cinco títulos con el Inter: en cuatro de las finales
marcó goles. Los más importantes, dos al Bayern Munich en la Champions League
2010. En la Selección
le dieron pocas chances, pero estuvo presente en un Mundial. Suma 234 goles en
su carrera y ya dijo que quiere retirarse en Racing, donde lo esperan con el
corazón abierto.
96) José
Manuel Chatruc (1999-2009)
Gran debut: derrota 7-0 ante Palmeiras. Pero el Pepe
tenía coraje y alma. Nadie gritó los goles con tanta efusividad en la historia
del club, incluso los de penal. Maravilloso año 2001, para salvar a Racing de la Promoción , primero, y luego
ser campeón. Dejó el club en andas en 2009, tras 117 partidos y 17 goles.
97) Reinaldo
Carlos Merlo (2001-2007)
No jugó en el club, pero ¿cómo no mencionarlo entre los
ídolos? Mostaza asumió como DT en 2001 y sacó 29 puntos para zafar de la Promoción. En el Apertura,
fueron 42 para ser campeones después de 35 años. Y en el Clausura 2002, otra
vez 29 puntos. Volvió en 2006, pero duró solamente 28 partidos.
98) Gabriel
Loeschbor (2001-2002)
Un torneo, el Apertura 2001, le alcanzó para merecer
estatua: goles a Independiente sobre la hora, San Lorenzo, Talleres y Vélez, el
día de la consagración. Altísimo defensor iniciado en Rosario Central, luego de
esos 33 partidos y 4 goles fue transferido al Rennes de Francia.
99) Gerardo
Bedoya (2001-2003)
El colombiano, carrilero izquierdo, le hizo goles de lujo
a San Lorenzo y Unión, pero el más importante fue contra River: zurdazo romperredes
para el 1-1 en el Apertura 2001. Es el jugador más expulsado de la historia del
fútbol, y en Racing sumó cuatro rojas. Estuvo en 64 partidos y gritó 5 goles en
el club.
100) Gustavo
Campagnuolo (2001-2009)
Sus dos primeras temporadas en el arco de Racing fueron
colosales. Figura casi siempre, especialmente en el Clausura 2002. Luego se fue
a México y volvió en 2005, con nivel más bajo pero algunos partidos notables. Tras
161 partidos en el club, se retiró en andas tras el Clausura 09.
101)
Sebastián Ariel Romero (2002-2006)
Chirola llegó desde un club amigo, Gimnasia, para
recorrer las bandas con mucha dinámica. Entendía de fútbol, sabía conceptualmente
qué hacer, y fue clave en los esquemas de Ardiles, Fillol y Rivarola. Jugó 116 partidos
y gritó 14 goles. En 2008 le hizo uno a Racing y pidió perdón a los hinchas.
102) Lisandro
López (2003-2005)
Él y Milito fueron los dos mejores delanteros de Racing
en el siglo XXI. Por lesiones, Licha debutó recién a los 20 años, pero ya era
crack. Fue goleador del Apertura 2004 y gracias a él, Racing peleó el Clausura
2005. Tras 71 partidos y 26 goles se fue al Porto y actualmente juega en Lyon. ¿Volverá?
103) Diego
Pablo Simeone (2005-2006)
El Cholo, de gran carrera en la Selección y Europa, siempre
quiso jugar en Racing. Cumplió el sueño en 2005 y estuvo cerca de ser campeón. Tras
38 partidos y 3 goles, con el equipo en crisis, se retiró para asumir como DT. Salvó
al equipo y no le renovaron. Volvió en 2011 y logró el subcampeonato.
104)
Maximiliano Moralez (2005-2008)
Pequeñísimo, fue enganche y mediapunta de un Racing urgido
por los promedios y mostró personalidad. Campeón juvenil, lo vendieron a Rusia
en 2007. Volvió seis meses después para salvar a Racing del descenso, e hizo el
gol decisivo en la
Promoción. Tras 90 partidos y 16 goles, se fue a Vélez.
105) Facundo
Sava (2006-2008)
Hincha de Racing, debutó con dos tantos a Nueva Chicago. Fue
el goleador del equipo en los cuatro torneos que jugó. En la sufrida Promoción,
metió un gol en Córdoba y asistió a Moralez en Avellaneda. Fueron los últimos
de sus 66 partidos, en los que gritó 29 veces. Ahora es DT.
106) Claudio
Yacob (2006-2011)
Muchos lo miran de reojo por su polémica salida del club,
pero nobleza obliga: si Racing sigue en Primera es porque él y un puñado de
valientes se cargaron el equipo al hombro en 2008, 2009 y 2010. Volante central
cerebral y corajudo, jugó 148 partidos y metió 7 goles. Ahora juega en West Bromwich,
de Inglaterra.
107) Franco
Zuculini (2007-2011)
A los 17 años lo tiraron a la hoguera del Racing que peleaba
el descenso y él apagó el fuego con sudor. Volante de marca, hasta patentó una
jugada: la cabezona, en la que va a trabar con la cabeza para no perder la
pelota. Luego de apenas 39 partidos y 2 goles, fue vendido a precio récord al
fútbol alemán. Volvió 6 meses en 2011.
108) Pablo
Lugüercio (2008-2011)
El día de su debut, Racing perdió 2-0 contra Lanús y él
salió ovacionado por su entrega. La escena se repitió durante sus tres años y
medio en el club. Delantero poco efectivo (12 goles en 120 partidos), asistía,
corría, marcaba a los defensores y nunca se le iba la pierna. En 2013, juega en
Arsenal.
109) Agustín
Pelletieri (2011-2013)
Luego de ser campeón con Lanús y pasar por Grecia, Simeone
le pidió que se sumara a Racing y no dudó. Volante central inteligente, genio
de los relevos, hasta atajó un penal tras expulsión del arquero. Los hinchas ya
le cantaron "Pelletieri, Pelletieri" y él lo retribuye dejando todo en
cada pelota.
110)
Sebastián Saja (2011-2013)
¿Quién hubiera pensado, cuando era emblema de San
Lorenzo, que al Chino lo iban a querer tanto? Llegó muy maduro desde Grecia y acumula
tres torneos casi sin errores. Un arquero con menos de un gol en contra por partido
de promedio es atípico en Racing. El lo está logrando.
PUBLICADO EN
EL GRÁFICO: 110 AÑOS DE RACING (MARZO DE 2013)
Hay que corregir Boloque y J. Perinetti que tienen el mismo texto.
ResponderEliminarLamento la omisión de Pablo Frers, Félix Díaz, Néstor Scotta y Hugo Gottardi, ubicados como excelentes goleadores dentro de los 25 máximos artilleros de la historia. El resto es un merecido homenaje al recuerdo.
Falta nestor ariel fabbri, para mi indispensable.
ResponderEliminarResto esta bien, la pantera bou, lautaro martinez y arquero arias de los ultimos tiempos.
Lo leí completo. Mb.yo me acuerdo de unas copas que Racing ganó en España. Creo Mohamed 5to y había un goleador que se llamaba Salomóne. No eran oficiales. Un recuerdo para el Pampa Irte y no me acuerdo de un goleador que se fue a Estudiantes EN LOS 80.
ResponderEliminarSe continúa con la actualización? 2023: agreguen a Iván Pillud.
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