La unión hace la fuerza. Y el oficio de Sergio Elio Ángel Fortunato era unir dos estructuras: la pelota y la red. Desde su infancia, cuando a los 9 años deslumbraba en San José de Mar del Plata. O en aquellos días adolescentes en Kimberley (donde convirtió sus primeros dos goles en Primera, en 1973) y en Aldosivi.
Unir, crear y festejar. Una y otra vez. Ése era su trabajo. Lo compró Racing, luego de un tironeo con Argentinos Juniors. Jugó para la selección juvenil el Panamericano de 1975 y, después de 12 goles en La Academia, tuvo un breve retorno a la 'ciudad feliz' con la camiseta del San Lorenzo marplatense. Terminó la especialización de goleador en Quilmes: 23 gritos en 55 partidos.
Estudiantes puso todas sus fichas en él: pagó 8 mil millones de pesos por su pase en febrero de 1978, record entre clubes argentinos. Fortunato no defraudó ni un poquito: arrancó con goles, siguió con goles y terminó con goles. 56 veces en total, en 102 partidos. Fue el máximo anotador del Metropolitano 1979 (junto a Diego Maradona), con 14 gritos. Inolvidable es la imagen arrasadora que dejó en aquel enfrentamiento de 1979 ante Juventud Antoniana: metió 5 goles y el Albirrojo goleó 8 a 2. También mostró su clase con tripletas bárbaras ante Newell's y Talleres de Córdoba.
Llegó a la selección mayor pero tuvo pocas posibilidades. Aprovechó su ciudadanía italiana para jugar en Perugia y sufrió, quizá, su peor golpe: descendió a Segunda División. Tras pasar por el fútbol austríaco (Austria Viena) y por Las Palmas, de España, retornó al 'Pincha' para jugar la Copa Libertadores de 1984. Inquieto, inteligente, oportuno. "Un picador, un clásico hombre de punta", se autodefinió alguna vez. Y, claro, un enorme goleador.
Debut en Estudiantes: 5 de marzo de 1978, contra Gimnasia (0-1).
Último partido en Estudiantes: 9 de diciembre de 1984, contra Independiente (2-1).
PUBLICADO EN 'ESTUDIANTES, 100 AÑOS', AGOSTO DE 2005.
fue un fenomeno sergio
ResponderEliminardaniel jaime dragunsky
Soy de Racing y estuve en la cancha de Estudianrtes cuando le
ResponderEliminarganamos 3-0 con tres goles de Fortunato,tuvimos que salir rajando porque casi nos matan .- Como paso con Trama y tantos otros Racing,lo dejo ir, los dirigentes son consecuentes en sus errores. También extraño sus goles.-
daniel gradassi.-
fortunato y hernandez la rompieron en el 79.
ResponderEliminarle ganamos un partido inolvidable al boca de
lorenzo 6 a 4 con 3 goles de fortunato, 2 de her-
nandez y uno de gottardi.
en el metro habia 2 zonas y clasificaban 2 por
zona.
nosotros salimos 3 en la zona por un robo infernal en cancha de independiente que nos gana
5 a 3 y el hijo de remilputa y coimero abel gnecco nos expulsa a hernandez y a fortunato el
dia qu asume el hijo de puta de grondona.
Totalmente de acuerdo.ese partido nos rechorearon.
EliminarYo era Secretario de Finanzas de Estudiantes, cuando Fortunato llegó en 1984 y tuvo un breve paso en esa temporada. En el verano siguiente un sábado fuí con mi esposa y mis 3 pequeños hijos a pasear por Palermo; estando allí próximo a retirarnos escucho que me llaman a viva voz, giro y era Sergio que como no tenia club estaba entrenando por las suyas en los bosques de Palermo y fue una enorme alegría, ¿saben porqué?; pues los jugadores en un 99% no guardan buena relación con los dirigentes y ese día Sergio me demostró que no todos son iguales; departimos amablemente y me agradecio lo bien que lo habíamos tratado en el Club; de tantos jugadores que pasaron en mis 4 años de dirigente, sólo tuve otro caso igual, fué el Toti Iglesias que en un reportaje por TV, manifestó que del único club que en toda su carrera lo habian llamado para pagarle lo que le debían luego que él ya no estaba en ese Club, había sido Estudiantes de La Plata y quien lo llamó fuí yo, porque esa era la manera en que nos manejábamos.
ResponderEliminarQue bueno lo que contás Jorge Oscar. Me alegra saber esas cosas que son imposibles de conocer si no parten de los protagonistas, como es tu caso aquí. Un saludo Pincha desde Paraná.
ResponderEliminarFortunato metió los tres goles en un partido contra San Lorenzo, 13 de mayo del 79.
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