martes, 11 de marzo de 2008

Juan José Negri, un símbolo de los '40

Cuando Estudiantes empezaba a extrañar a Los Profesores y buscaba un hombro para llorar sus penas, él puso el hombro, la habilidad y los goles. Juan José Negri es un referente de la década del ’40. Era un entreala derecho, pero se movía por distintos sectores para desparramar su habilidad y elegancia. La ofensiva de 1941, con Gagliardo, Negri, Laferrara, Cirico y Pelegrina fue fantástica, plena de estética y contundencia. Estuvo diez años en el club, hasta 1947. Luego pasó por Boca, River, Platense y el fútbol brasileño, donde fue campeón con Sao Paulo y Santos. Alguna vez, Pelé dijo que había aprendido mucho del ‘Pichón’ Negri.
Retornó al ‘Pincha’ en 1958 y cerró sus cuentas albirrojas en 234 partidos y 83 goles. Volvió como director técnico, aunque no hacía falta: nunca se había ido ni se irá de la historia grande de Estudiantes.


Debut en Estudiantes: 18 de diciembre de 1938, contra San Lorenzo (2-1).
Último partido en Estudiantes: 29 de noviembre de 1958, contra Independiente (1-2).


PUBLICADO EN ‘ESTUDIANTES, 100 AÑOS’, AGOSTO DE 2005

9 comentarios:

  1. soy hincha de sao paulo y me gustaria saber las fechas de nacimiento y muerte de negri

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    1. Pichón Negri falleció el día 20 de Febrero de 2003 a los 82 años; no poseo la fecha de nacimiento que ha sido en el año 1921 o 1922. Si lo puedo averiguar te lo envío. Colaboración afectuosa de un hincha de Estudiantes de La Plata a un hincha de Sao Paulo

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    2. Negri, según una página de Historia de Boca Jrs., nació el 08 de Marzo de 1920.

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  2. Este año (1957), en Primera División de Chile, San Luis terminó en su mejor lugar histórico, terceros y la Universidad Católica, dirigida por José Manuel Moreno, terminaría último. Los dirigentes canarios se habían propuesto a inicios de año formar un gran equipo para lo que buscaron a cuatro jugadores en Argentina: Héctor “Colorado” López, Eduardo Bernardo, Omar Lorenzo y Juan José Negri, sumados a Roberto Rodríguez que era de San Luis desde 1956, fueron los cinco extranjero de los quillotanos para la temporada 1957. Con ninguno había problemas reglamentarios, salvo en el caso de Negri, que en 1956 había jugado en el club Portuguesa Santista de Sao Paulo, Brasil. Como Negri había abandonado el club brasileño antes de cumplir su contrato, en Brasil no estaban dispuestos a darle el pase. Ante esto, los dirigentes de San Luis recurrieron al doctor Miguel Concha, rotario quillotano con buenas relaciones en Brasil, quien tuvo éxito en sus gestiones y consiguió, por intermedio del presidente de la Federación Paulista, convencer a los dirigentes del Portuguesa Santista para que concedieran el pase del jugador. El único problema era que había que solicitar el pase inmediatamente, porque iban a haber cambios directivos en el club paulista. Como Negri no estaba en Chile, se le consultó por teléfono el asunto, manifestando que se solicitara la tramitación colocando en el formulario de inscripción su nombre completo en el lugar donde debía firmar.
    Así se hizo, y desde Brasil llegó todo conforme. Negri estuvo todo el año en Quillota, firmó las planillas de juego en todos los partidos en que participó y firmó los recibos de pago de sus sueldos y sus primas. A fin de año, cuando se había producido el descenso de la Universidad Católica, Negri se acordó del detalle de su firma en su inscripción y se acercó a los dirigentes cruzados para “vender” su secreto. El reclamo de los universitarios se presentó en la ACF y fue tratado en el Tribunal de Penas, el que lo desechó por estar fuera de plazo, peor los cruzados siguieron buscando algún resquicio, hasta que lograron que el directorio de la Central, en una reunión de tres directivos, aprobara un fallo arbitral condenando a San Luis a perder 13 puntos, bajando de 30 a 17 puntos, quedando 4 puntos debajo de la Universidad Católica y cayendo al descenso. Sería uno de los fallos más vergonzosos en la historia del fútbol nacional. Incluso José Miguel Insulza, posterior canciller chileno y secretario general de la OEA, renunció a la católica porque no podía aceptar la injusticia cometida.
    Cuando se conoció el fallo que significaba el descenso de San Luis, los quillotanos se indignaron y organizaron un viaje a Santiago. En tren, micros, autos y camiones llegaron frente a la ACF e hicieron oír sus indignadas voces de protesta, incluso recorriendo las calles del centro de la capital.
    La Dirección General de Deportes acordó suspender la primera fecha del torneo de 1958 hasta que se arreglara la situación de San Luis, pero los clubes capitalinos hicieron causa común con la Católica y todo fue inútil. Triunfó el poder sobre el criterio.
    Para pero, en 1957 era presidente de San Luis el abogado Alfredo Ovalle Devoto, que había estudiado en la Universidad Católica y había sido dirigente de ese club deportivo. Como allá tenía sus grandes amistades, se “olvidó” de San Luis y no hizo a tiempo ni en la forma conveniente la defensa del club que presidía, consumándose así el descenso de San Luis.
    Con el tiempo se fue determinando que los principales culpables de esta “maquinación”, además de los dirigentes universitarios, habrían sido el propio jugador Juan José Negri, el entrenador argentino de San Luis, Carlos Orlandelli y el secretario de la ACF, José Bustos.
    Negri fallecería en febrero del 2003, en Argentina.

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    1. Que fácil que es ensuciar el buen nombre y honor de una persona en forma anónima, cuando esa persona ha fallecido 7 años antes y no tiene posibilidad de defenderse. Sr. Anónimo creo que Ud. se ha equivocado tremendamente.

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  3. Censura? muestren la realidad histórica...no solo lo lindo que fue como jugador..

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  4. Nada de censura, simplemente leo los comentarios antes de publicarlos para evitar el spam. De todos modos, cada uno tiene derecho a publicar lo que desee en su blog.

    Las acusaciones anónimas tampoco son muy simpáticas, pero me pareció un aporte interesante por si alguien quiere investigarlo.

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    1. Juan José Félix Negri13 de julio de 2013, 1:39

      Bien harían algunos que cuentan historias pretendidamente objetivas, intentando establecer responsabilidades tardias, en ocuparse de lo que en la actualidad está sucediendo en su vereda o a la vuelta de la esquina, donde seguramente habrá cuatro o cinco chicos tratando de imaginarse como sus "ídolos" futboleros, más no seguramente como los charlatanes de café amargo que escupen la borra sobre sus barrigas, donde ni siquiera se deben acordar si tienen ombligo. es solo una pequeña reflección trasnochada dedicada a los "anónimos", reservándome mis respetos

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    2. Estimado Señor Juan José Félix Negri, adhiero punto por punto a su reflexión trasnochada dedicada a los anónimos.

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